Crónica Belich - Molina

Estimados todos:

Ardua tarea nos ha tocado al resto del equipo al tener que suplir al papi con sus crónicas, hasta que se recupere completamente y pueda seguir con su enorme aportación al equipo.

Por lo que pido mil perdones desde ya a todos los que esperábais (y yo me incluyo) una nueva entrega de nuestro deambular por el mundillo del voley murciano con las palabras y en la forma que tanto caracterizan a nuestro querido compañero. Tened por seguro que los que las escribimos lo hacemos con el mismo cariño y con el mismo buen rollo que el papi, y no pretendemos buscar camorra o cizaña con nadie, si no dar una versión distinta y en clave de humor, porque creemos que a la larga conseguiremos ponernos en forma haciendo deporte, y lo que es más importante, fomentar el espíritu de equipo haciendo muchos más amigos.

Partido raro, corto, desastroso e incómodo para los nuestros, que por unanimidad nos hemos autoimpuesto a todos el trofeo caraculo. Así que, siendo así, la crónica no puede ser más que corta, fea y hasta un poquito desagradable que esto.

CRONICA BELICH - MOLINA:



Eso sí, que nadie se me enfade por haber puesto Sanjamierdeños, que en la crónica pasada ya explicamos que lo hacemos con "cariño", y sin ningunas ganas de ofender a nadie.

Y después del partido, hubo una barbacoa de celebración de cumple y de despedida (provisional de momento) de nuestro compañero Receptor, que nos ha dejao porque se quiere dedicar profesionalmente al padel. Gracias por estos años de compañerismo que nos has dado, y vete dejando el padel ya, que eres muy malo (peor que al voley), y con la racha de lesiones que llevamos no vamos a poder formar ni un equipo de voley playa.

Nos vemos en la pista.