En los albores de la playa

Cuando empieza a llegar el sol y al salir por la mañana a la calle sentimos la necesidad de ponernos las gafas de sol, hay un pensamiento que pasa por nuestra cabeza; "empieza la temporada de playa"

Atrás quedan los momentos de la pista, los "me duele el hombro, la rodilla y el tobillo", los "vamos a hacer una serie".....
Pero dentro de todas esos pequeños inconvenientes, también quedan atrás esos grandes momentos de risas y de grandes momentos de amistad, el saber que cada L-X-V terminabamos de trabajar y nos acercábamos a una pista de voley a ver a nuestros amigos. A contarnos las intimidades de cada uno, a rajar al vecino, y a preparar la próxima barbacoa.
Cuantos grandes momentos. Os acordáis del entrenamiento de navidad, de nuestra primera victoria este año, de nuestra primera derrota, de los trofeos de cara culo, de las cenas en casa del Mister, de los sábados de padel...?

Ahora todo eso queda atrás, y empezamos a pensar en la playa. Y con ese delicado motivo, el ir a jugar a la playa, en nuestro interior lo que verdaderamente estamos deseando es que lleguen esos días de playa que culminan con una cerveza en el chiringuito del Pepe, esos torneos en los que conseguimos juntarnos con gente que hace mucho que no vemos, esos días en los que terminamos rojos gamba, esos mojitos en el charco de pancho y otras muchísimas cosas que esperemos vivir todos juntos este verano.

Pero no tenéis que olvidar que al igual que la pista solo es un transcurso para llegar a la playa, la playa solo es un transcurso para llegar a la pista, y sobre todo y ante todo ambas cosas son una forma de pasar esos grandes momentos entre amigos.

Un abrazo amigos, os quiero!!!
Nos vemos en la arena