CV Molina 0-3 Voley San Javier. La victoria vuelve a casa.

Queridos compañer@s, dulce es el sabor de la victoria. Ya necesitábamos esta inyección de moral, después de 2 malos resultados (Santomera y Cieza). Pero empecemos desde el principio. Ambientación: dulce es la victoria, pero ¿hay algo más dulce que el azúcar? Pues ahí va (por cierto, la canción está inspirada en los elegantes zagales de San Javier):

Play, por favor

El Ventorrillo 08.00 h. (Pozo Aledo D.F. al lao de la única iglesia del mundo que no tiene ni reloj ni campana)

El caso es que pa variar, quedamos en un bar. En este caso para desayunar, aunque creo que más de uno de dió al Terry de buena mañana, a tenor de lo que ocurrió después. Cuando llego me dice el receptor:

- Ahí tienes tostadas y tomate.

Las tostadas tenían una pinta cojonuda, pero ah! amigo, no intentes hincarles el diente... Para que os hagáis una idea, me llevé unas cuantas para levantar un murete que voy a hacer en mi casa.. Pero bueno, si le ponías tomate y las dejabas un par de horas, al final se reblandecía y podías roerlas un poco. Por cierto, me fui sin pagar mi café... Seré cab...

Los zagales iban llegando, más o menos puntuales. El último en llegar El Mister.

-Hala! Vámonos!

Estábamos avisados de que había un examen en la universidad de Espinardo y que la autovía podría estar colapsada, así que pasado el Puerto de la Cadena, hacemos una llamada al coche del Jump:

-Oye, mejor cruzamos Murcia, no vaya a ser...

-Ok

Fue colgar el teléfono y ponerse el coche del Jumping en cabeza. Recordad lo que pasa cuando el coche del Jumping se pone en cabeza (ver entrada) Pues eso, que llegamos directos al atasco de la autovía. Teléfono:

-Acho! si no queríamos ver el atasco, queríamos EVITAR el atasco...

Menos mal que el carril de la izquierda a la altura de la universidad iba quedando libre y no tuvimos muchos problemas. Pero aún había que perderse en Molina, y es que el coche de "cabeza de caravana" también se equivocó de entrada la ciudad. Menos mal que preguntando... verdad, Jump?. Por fin llegamos al Pabellón Serrerías (por cierto, da gusto jugar en instalaciones como esta... no como otras... ver entrada) y primer incidente. Marcialillo se baja del coche de Jump, y cierra la puerta con el cinturón de seguridad por fuera... ¡¡CLONG!! Resultado, raspón y bollo en la carrocería y el Jumping cabreao como un mono... Y va el peazo cab... del Marcialillo y le dice:

-No, si lo he hecho a casico hecho... Pa motivarte!!!

Un poco más y se lo come. No sabemos si por este incidente, pero el Jumping jugó un gran partido. Hemos quedado en que para el próximo partido, cada uno grabará su nombre con una llave en el capó...

Entramos y.. oh! calefacción. Así da gusto. Así no hace falta encender hogueras en los vestuarios, que aunque muy divertidas, pueden resultar peligrosas... (ver entrada)

Por cierto, hay una cosa que queremos reivindicar, para que la instalen en nuestro pabellón: un túnel de vestuarios, de esos que se extienden hacia la pista (tipo gusano, algo así) porque viene de puta madre para jugar a "la mosca", y si no que se lo pregunten a más de uno que se llevo unos cuantos en la merla...

Partido de baloncesto para calentar. Si somos malos jugando al voley, ver a los zagales de San Javier jugando al basket es para colgarlo en el you tube...

-Las reglas son: no valen cabezazos en las narices ni tironcicos de webos, que os conozco... Lo demás vale todo...

Menos mal que nadie salió herido. Según palabras del Mister:

-Si hubieramos jugado en Cieza y Santomera como ahora al basket... Maná de cabrones!!

Y empieza el partido. Afortunadamente y después de 2 meses, el Mister contaba con el equipo al completo, así que esta vez no había excusas. Y no las hubo. Esta vez, el trofeo cara-culo quedó desierto. 0-3 y a la ducha. Que contentos van los zagales de San Javier! Más tarde las chicas vencerían su encuentro 1-3 para completar un día redondo...

Por cierto, yo me volví a San Javier y no puedo contar lo que sucedió después en la grada... quizá alguien pueda contarlo...